14 de Febrero, Día de San Valentín. Fecha que suele ser el azote de muchos, ya sea por poner en él demasiadas expectativas o muy pocas. “Del amor y la amistad” que para fines prácticos podría ser “de la gimnasia y la magnesia”.
Acá en Since, tenemos opiniones encontradas sobre el día.
Todos celebramos la amistad; nuestras opiniones sobre el amor van de una fe ciega en este, a un cinismo desproporciona (depende del día y cómo nos ha ido en la feria); aborrecemos la cursilería basada en desperdiciar recursos (ositos de peluche que van a acabar en el closet, llenar un coche de post its–¿siguen haciendo eso?–); nos pone una nerviosa sonrisa en la cara ver las filas que se hacen para entrar a hoteles y moteles de paso; y nos espanta lo creepy que se puede poner la banda este día.
Lo mejor de hoy es que nos da pretexto de armarles dos playlists de punk viejuno, uno de puras canciones contra el amor y otro de puras di-amorrrrr… ni qué decir, el punk puede ser cursilón.
Así que éntrenle con ganas:
El amor es chido (a veces)
o si andan de gruñones:
El amor apesta (a veces)