Atita Verghese no sólo es reconocida por convertirse en la primer pro skater en la India, sino que, al mismo tiempo fue partícipe de la fundación de Girl Skate India, una iniciativa que enseña a niñas a patinar, promueve la equidad de género y une a los que practican este deporte a partir de talleres y actividades afines al skate. Al crecer en Bangalore, Verghese tuvo la fortuna de contar con un modelo a seguir femenino,decidido a romper con las barreras culturales de algunos sectores conservadores de la sociedad hindú: su madre. Un punto de inflexión para que ella pudiera sentirse libre de explorar posibilidades a las que no todos tienen acceso en el país.
A lo largo de los años tuvo acercamientos con otros deportes, sin embargo, no fue hasta 2013, cuando contaba con 19 años de edad, que que subió por primera vez a una tabla y comenzó a frecuentar un skatepark durante el auge del skate en el país. A pesar de sentirse en su elemento por primera vez y aprender rápidamente, no poseía una tabla propia; tenía que esperar el momento de que los patinadores tomaran un descanso para que le prestaran la suya; no sería hasta finales de dicho año que recibió una como regalo gracias a una iniciativa para gente apasionada al skate que no tenía posibilidad de adquirir una por sus propios medios.
El crecimiento fue rápido y exponencial. Verghese empezó a involucrarse en proyectos locales cuyo objetivo no era sólo promover la práctica del skate en niñas y mujeres de la India, sino en la creación y fortalecimiento de infraestructura en diversas partes del país, buscando crear un ambiente propicio para que cada vez más personas se interesaran en la patineta. Conoce más sobre su historia a continuación.