“La sangre se esparce rápidamente”

Ed Wood, ed Caja Negra 2015

Iba a mandarlo al cementerio. Lo supo desde el momento en que la vio volando hacia él, con la cuchilla reluciendo por encima de la cabeza. Lo único que registró su mente fue la cuchilla y el color rojo de sus ojos, hipnotizándolo desde el principio.

En pleno 2018 seguimos lejos de la liberación sexual, aunque gracias a RuPaul el travestismo es visto con una nueva cara y las Drag Queens dan espectáculos cada fin de semana. Vivimos un tiempo en que finalmente las ideas de Ed Wood, quien siguiendo sus propias aficiones y apegos sexuales y de identidad, se convertía en un travesti de nombre “Shirley”, son relativamente  aceptadas, y en ciertos espacios son bastante aplaudidas.

Irreverente, atrevido, sexual, liberal, un adelantado a su tiempo, así fue Ed Wood. Un artista/cineasta que no tuvo tiempo de disfrutar de la fama y el culto que se le brinda hoy en día, por fortuna gracias al trabajo de Bob Blackburn por recopilar su trabajo alejado de los sets, por primera vez en 40 años podemos leer los cuentos que escribió durante una de las épocas más difíciles de su vida.

 

Con una prosa que reivindica el sinónimo de pulp como lo dice en su tapa. Estos relatos si bien podrían encontrarse en cualquier puesto de periódicos, junto a todas las historietas de bolsillo que se compra con una sola seña, no son sinónimos de literatura mal escrita, por el contrario, se sienten humanas, bien estructuradas y con una gran carga política y de lucha social.

En total 26 cuentos que nos hablan de todo y dan voz a todas esas situaciones que desde mediados de los 50 a los 70  sucedían en forma paralela a todos los reflectores. Aunque algunos cuentos parece que se terminan de forma rápida, hay textos que ponen en duda la utilidad de la iglesia, muestran la barbarie de la guerra –Ed Wood fue veterano de la Segunda Guerra Mundial–, otros que  hablan de las diversiones perversas y perturbadoras que nacen en la cabeza de algunos hombres enfermos donde, la vida parece un simple juego y menos vale si se trata de una puta.

“El golpe le sacudió hasta la entrepierna, haciéndole temblar el clítoris y crispando los labios que rodeaban su profundo canal amargatorio… La impenetrable oscuridad de la inocencia se apoderó de sus sentidos, y ella no se enteró de nada más durante lo que le parecieron horas y en realidad fueron solo cinco minutos“

Y como todo escritor que se inclina por la literatura erótica, se habla de amor de una forma real y cruda como en “Divorcio Isleño”,  “Escena íntima / Despegue” o “La estrella del sexo”. Cada uno de estos cuentos, muestra personajes hetero y homosexuales sedientos de placer, que son usados o usan a los otros como simples pedazos de carne en los cuales encuentran la satisfacción, el castigo, o la muerte.

La Sangre se esparce rápidamente, muestra de forma íntima a Ed Wood, y dista mucho de lo que se puede ver en la cinta de Tim Burton de 1994, del mismo nombre. Este compilado de cuentos provoca y da rienda suelta a los bajos instintos y se disfruta como una noche fuera de casa.