El odio, segunda película del director Mathieu Kassovitz, fue proyectada por primera vez en 1995 en el Festival de Cannes en donde Kassovitz ganó al final de la jornada el Premio al Mejor Director. Sin embargo, la película necesitaba enfrentarse al público real para dejar clara su valía y su aportación. Cuando ello ocurrió, cuando el público finalmente pudo verla, atestiguamos el nacimiento de un clásico instantáneo.
La película nos lleva al lado de sus tres personajes (Vinz, Hubert y Saïd) a lo largo de 24 horas en las que buscarán primero, aclarar sus pensamientos sobre el ataque de la policía a uno de sus amigos, y después, sobre lo que ocurrirá en el futuro de sus vidas y del barrio en el que viven.
Llena de potencia, de vitalidad, de rabia, inundada de reflexiones directas y profundas, con una narrativa innovadora que ha sido influencia de películas estrenadas 25 años después, El odio es una experiencia obligada para cualquier cinéfilo que se llame así.
Les dejamos este nuevo episodio de #Retrovisor en el que Erick Estrada y Sergio Huidobro analizan la película de Mathieu Kassovitz.