Habrá quien piense que el Día de Muertos no ha recibido buen tratamiento en el cine. Algunas películas han hecho mal uso de él y otras quizá se hayan quedado cortas. Lo cierto es que se trata de una celebración vistosa, atractiva, colorida y aunque dolorosa en un sentido, resulta irresistible para quienes se dedican a contar historias en el cine.

Pues bien y con pretexto de la colección Día de Muertos Vans aquí hay algunas películas que han ofrecido lo mejor de esta celebración al mundo a través de sus historias o, quizá, de sólo una imagen.

Macario.
Roberto Gavaldón.
1960.
Es sin duda la gran favorita. La historia de un leñador que literalmente muere de hambre y su encuentro con la muerte, una Parca que le ofrece una mejor vida a cambio de la mitad de un guajolote que Macario está a punto de devorar, un trato que se convierte en leyenda y que ahora sigue fascinando a cinéfilos de todo el mundo.

Hasta los huesos.
René Castillo.
2002.
Un hombre que simplemente no acepta (o no se ha dado cuenta) de que ha muerto debe recorrer un camino desde su propio entierro hasta el inframundo para finalmente aceptar su suerte. Es un fascinante cortometraje animado premiado en festivales de todo el mundo.

El libro de la vida.
Jorge R. Gutiérrez.
2014.
En el Día de Muertos una apuesta se libra alrededor de un amor aparentemente imposible. Las almas que visitan el mundo de los vivos se divierten con un juego que debe hacernos reflexionar sobre el pasado para saber lo que haremos en el futuro. Esa es parte de la idea de la celebración de este día.

Coco.
Lee Unkrich, Adrián Molina.
2017.
Un niño con una conexión natural con la música no comprende por qué en su familia ésta está prohibida determinantemente. Será a través de un viaje al inframundo (un Mictlán bastante bien reconstruido) que conocerá la historia que atormenta a su familia y en el que también aprenderá el valor del perdón.

Spectre.
Sam Mendes.
2015.
No es precisamente una película dedicada al Día de Muertos pero su escena inicial ocurre en un desfile para esa celebración que si bien no es tradicional ni real, visualmente es un pequeño regalo que podemos darnos de vez en cuando. De los mejores inicios en la larga serie del 007.