El 13 de agosto de 1982 la cultura surf y skate de California que estableció a Vans en lo que es, tomó un giro comercial después de que Jeff Spicoli, personaje interpretado por Sean Penn en la película Fast Times at Ridgemont High, catapultara el uso de los Checkerboard Slip-On.

El personaje de Sean Penn encarnaba en ese momento el estilo de vida de los skates y también tocaba en una banda, características que siguen siendo parte de la esencia de Vans.

Fue a partir de ese momento que lo que empezó con una silueta sencilla, clásica y con un patrón cuadriculado provocara una evolución de distintos diseños, colores, ilustraciones mucho más elaboradas y adaptaciones de personajes de Disney, entre otras más.

La customización de calzado Vans fue posible desde sus inicios en 1966, siempre y cuando tu proporcionaras la tela que querías adaptar. La demanda por crear tus tenis originales claramente fue creciendo y las posibilidades se volvieron infinitas al grado que la variedad de patrones se convirtió en parte del proceso de diseño e identidad de la marca.

Después de una serie de campañas fructuosas que buscaban promover los diferentes modelos y aún mejor, la customización del mismo también surgió en la oportunidad de agregarle diseño a los laterales de la suela lo cual desencadenó varias cosas: una de ellas que tus Authentic rojos se transformaran y lo mejor, el concepto y propuesta de Vans, estaba a la vanguardia y al frente en comparación con el resto de las marcas de tenis o calzado y fue imitado interminablemente.

Vans ha trabajado con el uso de los laterales como parte del diseño a lo largo de los años, particularmente en reediciones. Y en sus inicios, Paul Van Doren hasta organizó concursos de dibujo con niños para que propusieran su propio diseño y cuando veía que se repetían figuras, Vans las materializaba e incluía en su catálogo de opciones para tus Custom Scenes.

Durante los 80, la demanda por customizar los laterales fue alta y entrando los 90 ya sólo se incorporaban en diseños de colaborativos o Vault. Tristemente es un arte que se perdió y que estamos deseando que regrese para agregarle vida a nuestro modelo favorito.

Para realizar este artículo, agradecemos a Pillow Heat por compartirnos fotos y platicar con nosotras.

xo,
Adria